El taller virtual de dos encuentros realizado por TAL surgió de la necesidad de los canales asociados a la red de debatir, hablar, discernir y encontrar puntos de encuentro que permitan el abordaje en equipo de esta problemática que afecta a todo el mundo y en especial a nuestra región. 

"Nos toca a nosotros la tarea titánica de luchar contra una corriente que ha crecido tanto aquí a diferencia de otros continentes en los que los ciudadanos están más conscientes, capacitados y alertas, para detectar una Fake News cuando toman contacto con ella y se disponen a compartirla”, consideró el peruano Hugo Coya, ex presidente del Instituto de Radio y TV de Perú y especialista en infodemia. 

Coya citó un informe de Kaspersky y CORPA que concluyó que el 70 por ciento de los latinoamericanos no logra identificar una Fake News. Perú es el país donde mayor porcentaje de personas no logra discernir entre una noticia falsa y una verdadera. Le siguen Colombia, Chile, México, Argentina y Brasil. 

Coya recordó que al hablar de Fake News nos referimos a “una información elaborada a propósito, sensacionalista, o totalmente fabricada que imita la forma de las noticias principales.” También habló de "deepfake", o el uso malicioso de audios, videos e imágenes que busca confundir y puede ser muy difícil de distinguir del contenido real. 

Todo esto lleva a la polarización y a una crisis de desinformación que genera cambios en el sistema de medios de comunicación. Pero también a informaciones estandarizadas, al aumento de nivel de información a través del incremento de acceso a internet, redes sociales de noticias creadas especialmente para el “clickbait” o ciberanzuelo, etc. 

El sistema actual elimina la doctrina de la equidad. Según Coya "los medios están en desventaja para tener los recursos suficientes para contarrestar estas tendencias" La imparcialidad, que establecía un trato "justo" entre los bandos opuestos, viene desapareciendo. El resultado es la reducción del espacio para las noticias verdaderas y el aumento de los espacios asignados a no periodistas o grupos de interés. 

Coya se refirió a la influencia de las redes sociales y cómo condicionan los procesos políticos y la percepción del público. Se refirió a los casos de la crisis política peruana y la percepción del COVID en el público estadounidense y a la velocidad en la que viajan en las redes sociales las Fake News: seis veces más rápido que una historia verdadera. "Cada segundo cuenta en tratar de contrarrestar y aclarar esa noticia falsa. Cualquier acción que nosotros pretendamos como medios públicos para actuar tiene que ser inmediata. Porque sino las consecuencias serán mucho más difíciles de contrarrestar o anular"

A través de una serie de gráficos que acompañaron su presentación, Coya se preguntó cómo solucionar el problema de la desinformación. “Podríamos pedir cuentas a los líderes por mentir, pero no lo detectamos cuando los líderes de nuestro bando lo hacen, y no valoramos la verdad lo suficiente como para basar nuestro voto en ella. También podríamos obtener nuestra información de fuentes fiables, pero muchos de nosotros preferimos fuentes que nos digan lo que queremos creer. Hay una gran demanda de información confirmatoria. Y también podríamos exigirnos a nosotros mismos un mayor nivel de exigencia. Pero el sesgo de confirmación está tan arraigado que tendemos a rechazar la información conflictiva”, concluyó. 

Esta segunda y última jornada del taller de Infodemia y Fake News organizado por TAL cerró con la participación de Gabriela Ramírez y Antonio Nieto, del Centro de Información de la ONU (CINU) para México, Cuba y República Dominicana y representantes de la iniciativa Verified que surgió en el seno de la ONU durante la pandemia de COVID-19 como un intento de contrarrestar la información falsa sobre el virus, las vacunas y los discursos de odio. "No podemos ceder nuestros espacios virtuales a quienes trafican con mentiras, miedo y odio”, había dicho António Guterres, Secretario General de la ONU, al momento de justificar la creación de esta iniciativa.

"Nos dimos a la tarea de elaborar materiales para redes sociales a la vez que seguíamos con un monitoreo muy intenso todas las noticias”. Citaron como ejemplo lo sucedido en México, donde  la desinformación llevó a ataques contra los profesionales de la salud en momentos en que se decía que diseminaban el virus por la ciudad al retirarse de los hospitales. "Gracias por cuidarnos” fue la frase de una de las campañas con las que Verified hizo su aporte para contrarrestar estas noticias falsas y negativas. 

"No todo lo que ves en línea es cierto. PAUSA. Verifica lo que ves antes de compartirlo”, se leía en una de las presentaciones de la alocución de Ramírez y Nieto. Los especialistas pidieron que nos hagamos cinco preguntas antes de compartir una información: ¿Quién es el responsable? ¿Cuál es la fuente de la información? ¿Cuál es el origen de la información? ¿Por qué la compartes? ¿Cuándo se publicó?  

El equipo de Verified también relató los alcances de las acciones diseñadas en el marco del Día Internacional para contrarrestar los discursos de odio (celebrado por primera vez el 18 de junio pasado) y consideró muy importante la alianza firmada con el Sistema Público de Radiodifusión de México y la producción y realización de audiovisuales en el marco de esta cooperación. El más destacado de ellos: Infodemia, la serie producida por el Canal Catorce, el CINU y la agencia de noticias argentina TÉLAM.

El trabajo en equipo que requiere el combate a la Infodemia es la guía rectora de TAL para seguir trabajando sobre esta problemática que preocupa a todos los canales de la región. Como dijo Jenaro Villamil, actual presidente del Consejo Directivo de TAL y presidente del Sistema Público de Radiodifusión de México en el marco de este segundo taller: “El de la infodemia es uno de los desafíos comunes en todo el continente, en todos los países y también un desafío para los equipos de los medios públicos, en especial para los equipos periodísticos e informativos."